Por Marcela Leopo Flores

El Poder Judicial, a lo largo de los años no ha estado exento de escándalos y abusos de poder. La prensa no los ha documentado todos, pero si algunos que son verdaderas “perlas” del actuar de quienes se encargan de procurar e impartir justicia.

Desde el otorgamiento de bonos de a millón de pesos por Magistrado  , acusaciones directas  a otro por un supuesto asesinato por encargo y despecho  que hiciera una de sus ex novias al ser victimado su amado en turno , manejos políticos en ascensos, descensos y posiciones, incapacidad para dictar sentencias, liberación de delincuentes y la conducta ostentosa de los juzgadores que estacionan a la puerta del Tribunal vehículos último modelo y que superan en costo el medio millón de pesos, son apenas una muestra de cómo se maneja este Poder en Jalisco.

Los sueldos de Magistrados son ahora tan jugosos, que quienes terminan su período no quieren irse y se aferran al “hueso” con  vehemencia haciendo su lucha en Tribunales Federales, pasando por encima al Legislativo. En prácticamente todos los casos han salido victoriosos.

Hay 14 Magistrados que incluso ganaron “la inamovilidad”, son vitalicios. Este juicio por cierto fue pagado a un litigante que les llevó el negocio cobrando más de un millón de pesos. Dinero que por cierto, salió de las arcas del estado.

Siendo Directora de Comunicación Social, del Supremo Tribunal de Justicia en el 2002, hice una serie de entrevistas a Ex Presidentes, que a la postre documenté en un libro titulado “50 años del Palacio de Justicia en el Estado de Jalisco”.

En una de ellas, el Ex Presidente del STJ  Alberto Orozco Romero (1965-1967) advertía sobre la justicia : “ necesita de una imagen austera, sin militancias políticas,  no debe manejarse por gente vulgar. Sin respeto, la justicia no vale nada.

Hubo otro Ex Presidente,  Jorge Saracho,  (1977 – 1980)  que llegó de la Ciudad de México y fue impuesto por el Ex Gobernador Flavio Romero de Velasco, con la encomienda de hacer  una “depuración” de la mayoría de Funcionarios del Poder Judicial, que comprendió Magistrados, Jueces de Primera Instancia, Secretarios de Sala y empleados de todas las categorías, como Notificadores.

Saracho tenía clara la encomienda del Gobernador : hacer una limpia para responder al clamor general que exigía que se pusiera fin a  la impunidad de los criminales, a los abusos de todo orden, a la zozobra, y a la injusticia imperante en el Poder Judicial.

En ese entonces, por idénticas razones en el Poder Ejecutivo se realizó una remoción completa de Agentes del Ministerio Público, Directores y Alcaides de las cárceles y Jefes policiacos. Solamente aquellos funcionarios cuya probidad había merecido el reconocimiento público fueron ratificados en su cargo.

En su primer Informe de Labores, Saracho mencionó que para la selección del nuevo cuerpo de Magistrados, Jueces y Secretarios, se tomó como base la limpieza de sus antecedentes y su vocación de servicio.

El Magistrado Saracho , dijo que al llegar al cargo se encontró  con la sorpresa de que buena parte del mobiliario de los juzgados pertenecían a los  abogados. Contaban con  archiveros para el uso de sus expedientes y su propia papelería y lo que era peor aún , tenían la facultad de formular autos y sentencias en los negocios en que eran partes, sustituyendo de forma absoluta a la autoridad judicial. Había Juzgados en los  que cada diligencia o resolución tenían un precio.

En su período se dieron las principales Reformas que hasta hoy prevalecen en la Ley Orgánica del Poder Judicial.

La crisis por la que hoy atraviesa el Poder Judicial con su Presidente Luis Carlos Vega Pámanes , es producto del alejamiento de su vocación por la justicia y actitud de servicio . No tiene derecho a quejarse, después de que el mismo ha sido artífice de corromper la justicia. No cabe tampoco que ahora justifique sus antecedentes delictivos como “errores de juventud”.

En manos del Gobernador Aristóteles Sandoval, está hacer una “limpia” de este Poder que apesta, porque , Pámanes es apenas la “punta del Iceberg” de esta institución que a todas luces declinó su autoridad al mejor postor , ya sea  “al  Patrón” o al  Partido Político en turno.

Habrá que ver si se le somete a la acción de la justicia, por haber llegado a ocupar el puesto de mayor jerarquía en esta institución a base de corruptelas y mentiras.